Están llenos de microcristales que se convierten en gel cuando se empapan de agua. El gel forma un suave cojín que resulta cómodo para la piel del caballo. El diseño anatómico permite que los caballos puedan pasear mientras llevan las botas; no es necesario que se queden quietos. Las botas de agua fría son una gran idea para reducir los hinchazones, enfriar los tendones después del ejercicio o tratar las lesiones.
1.UTILIZAR LAS BOTAS DE AGUA FRÍA DESPUÉS DEL EJERCICIO: Después del trabajo duro, las botas de agua fría deben aplicarse durante unos 20 minutos. Para un tratamiento extra de frío, coloque hielo o bolsas de hielo en el cubo de agua en el que se están empapando. Cuanto más fría esté el agua, más frías estarán las botas. Para obtener un efecto de frío máximo, coloque las botas de agua fría directamente desde el agua helada en una bolsa y déjelas en el frigorífico durante una hora, lo que proporcionará un chorro de frío inicial de 3 a 5 minutos en la pata del caballo. No congele nunca las botas de agua fría.
2.UTILIZAR BOTAS DE AGUA FRÍA PARA LAS LESIONES: Aplíquelas al menos 6-7 veces al día y utilícelas durante no más de 20 minutos cada vez. Después de 20 minutos, el calor de la pata del caballo empezará a calentar de forma natural las botas de agua fría.
Instrucciones de uso: Si se compite o se utiliza por lesión durante un par de días, las botas pueden guardarse en el cubo de agua. Una vez que haya terminado con las botas, debe colgarlas para que se sequen, lejos de la luz solar directa. Una vez secas se pueden guardar. Cuando vuelva a utilizar las botas, póngalas en remojo durante 1 hora para reactivarlas.